En
La casa de las flores muertas, la
señora Stringle comenta durante una cena que, mientras vivía en Menorca, se
cruzó en una ocasión con Lady Hamilton. Más tarde, Julia le reprocha su
mentira, dado que Lady Hamilton nunca estuvo en la Isla y la señora Stringle le
responde que lo ha dicho para darse importancia delante de aquellas mujeres tan
altivas.
El
almirante Nelson llegó a la isla de Menorca el 12 de octubre de 1799 a bordo
del Foudroyant. Se sospecha que se hospedó en el predio de Sant Antoni,
hermosa finca del puerto de Maó más conocida como Golden Farm, y que
seis días después zarpó para Sicilia y Malta. Fue una estancia breve que no da
para mucho, pero la leyenda popular se encargó de enriquecerla añadiendo que el
almirante regresó dos veces a Menorca, en 1799 y en 1800, acompañado de su
amante, Lady Hamilton.
Golden Farm está donde el punto rojo
Las
relaciones del almirante y Emma Hamilton han dado mucho juego a lo largo de la
historia, aunque no se ha podido probar ni que el almirante regresara a Menorca
ni que la isla fuera su nido de amor.
Con
solo quince años Emma (posteriormente Lady Hamilton) ya era amante de Sir Harry
Featherstonhaugh y durante esa época entabló amistad con Charles Greville,
del que también se hizo amante. Fue musa del pintor George Romney y,
probablemte, algo más. Se trasladó a Londres, donde Sir Harry le puso una casa
y ella empezó a ser conocida en los ambientes elegantes de la ciudad y a
relacionarse con gente importante.
Se casó con Sir William Hamilton
y, como bien es sabido, se hizo amante del almirante Nelson. Esta relación era
sobradamente conocida, aprobada y hasta impulsada por el embajador y esposo de ella.
Y es que, si la señora tenía sus amoríos, el embajador tenía sus intereses.
Para entenderlo hay que recordar que Nelson ya era en 1799 el marino británico
más famoso, convertido en un mito en vida para su país. Llevarse bien con
Nelson suponía buenas relaciones en el Almirantazgo, un enchufe muy positivo,
mejores influencias en las esferas de poder. Emma estaba relacionada con la
reina napolitana y, desde sus tiempos en que vivía en Londres, con la gente
elegante y los ambientes selectos de la ciudad inglesa.
Sin embargo, de ahí a afirmar
que Lady Hamilton estuvo con Nelson en Menorca hay mucha distancia.
Probablemente, durante su primera y única visita a la Isla, Nelson ni siquiera
se hospedó en Goldem Farm, que por aquella época todavía era un convento, pero
a los dueños de la hacienda y a las instituciones menorquinas les ha convenido
económicamente propagar la leyenda.
Golden Farm
Existe correspondencia entre Sir
William y Horatio Nelson durante las fechas en las que él estuvo en Menorca. En
esa carta, Sir William y su esposa manifiestan su desesperación por la ausencia
del marino, al que expresan sus deseos de rápido regreso a Nápoles donde la
vida no era tan agradable sin su presencia. En una de esas cartas, Sir William
escribe a Nelson:
"No puede imaginarse lo
tristes que nos encontramos sin usted y nos atrevemos a afirmar que usted no se
encuentra tampoco muy alegre … Pedimos a Dios que nos lo devuelva
pronto. Estoy demasiado débil y sin ánimo para escribir más pero le expreso mi
más sincero afecto, su siempre afectuoso amigo y humilde servidor, William
Hamilton. Emma le escribe también así que no tengo que añadir nada más."
Esto significa que lady Hamilton
jamás pisó Menorca pues estuvo esperando el regreso de Nelson a Nápoles. Por
tanto, es falsa la romántica historia de los amantes celebrando, durante su
estancia en Mahón, furtivos y apasionados encuentros amorosos en Golden Farm. ¿Tendrá
algo que ver nuestra señora Stringle con la propagación de este rumor?
Una vez más, muchas gracias por escribir artículos tan interesantes. Me encanta cómo explicas las referencias que hay en tus libros :-)
ResponderEliminarUna vez más, gracias a ti por hacerme sentir que no hablo sola ;)
ResponderEliminarEstoy segura de que muchas personas te leen ^_^
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